viernes, 8 de julio de 2022

Quaryat es el aceite virgen extra de Sierra Nevada en Granada

 

Aceites Quaryat Dillar

Ayer a medio día estuve almorzando con unos amigos en un lugar muy especial en Granada, se trata de ATELIER, casa de comidas. En donde disfrutar placenteramente de los alimentos tradicionales pero con una cocina innovadora y sorprendente. Todo acompañado de nuestra cerveza granadina, excelentes vinos  y un nuevo descubrimiento para mí, el aceite Quaryat el cual me gustó desde el inicio y por eso quiero recogerlo en este humilde y sencillo espacio. ¡ Ya sabéis que doy a conocer aquello que me sorprende!

Foto extraida de la página de La Almazara

Empezaré diciendo que, La Almazara Quaryat Dillar elabora el aceite de oliva virgen extra más premiado de Sierra Nevada (Granada), respetando y cuidando el medioambiente. 

Y se distribuye a través de David Rodríguez Distribuciones, que es quien  se encarga de que en ATELIER no falte este  aceite para el disfrute de los comensales. Conozco a David desde hace algún tiempo y me da mucha seguridad y confianza  todos los productos con los que trabaja porque sé que trabaja con lo mejor. Y él está muy comprometido con su trabajo. Gracias a David conocí algunos vinos y bodegas, entre ellas, la bodega Vizcarra y  reconozco que soy una apasionada de los mismos.

Foto tomada de la página de la Almazara 

Pero hablemos del aceite, un aceite llamado Quaryat -Dillar que es de nuestra tierra, concretamente del Parque Nacional de Sierra Nevada ( Dílar, Granada ).
Proviene de las aceitunas de los preciosos olivares que están a más de 1000 metros de altitud. La familia de esta empresa quieren dar prioridad y destacar la integración medioambiental del proceso, respetando el entorno donde está ubicado y compensando con su huella ecológica. 

Foto extraido de la pagina de la almazara

 Es un producto excepcionalmente natural, delicioso. El aceite es un alimento estrella en la cocina por sus multiples  propiedades.  Gracias a ellas,  al proceso de elaboración y al sistemas de control de calidad, se consigue la excelencia del producto que un comensal siente y disfruta en mesa. 

Niño/a oliendo el aceite antes de tomarlo

Aunque las sensaciones que tienes cuando catas un aceite, para cada uno/a puede ser  diferentes, porque eso va a depender de la expreriencias sensoriales previas que cada un@ tengamos. Por ejemplo, a mi, tanto en nariz como en boca me evoca a mi infancia y me traslada a los momentos vividos en el patio de mi casa, entre macetas y  con mi abuela preparandome la merienda. Me encantaba acompañarlo con azúcar, con miel, con chocolate o incluso con sal y jamon serrano,  dependiendo del día. 



El primer aceite que ayer  fue el Quaryat monovarietal, elaborado con aceitunas de la variedad Arbequina procedentes de los olivares situados en las estribaciones de Sierra Nevada a 1.000 metros de altitud. 
En nariz percibí aromas muy agradables a campo y a frutas como platano y manzana. 
En boca seguí notando el sabor a platano, manzana e incluso frutos secos. El pan estaba riquisimo con este aceite. Diría que es un aceite con buen equilibrio, fresco y con intensidad ligera, que te invita a seguir tomandolo.


Este segundo aceite con aceitunas verdes de la variedad Picual es una delicia. 
En nariz me muestra aromas de monte bajo, como el tomillo y el  romero.
En boca era muy delicado y gustoso, me mostraba sabores a almendra, a olivo y a campo. El aceite lo consideraria con una intensidad media-alta, equilibrado y muy rico. Es una aceite muy adecuado para tomar mojando pan tierno y riquisimo en tostadas, para acompañar con ensaladas de tomate, para las ensaladas de pasta...


Me siento muy dichosa cuando encuentro productos tan ricos como este aceite. Me gusta el campo y me agrada saber que los olivos tienen que estar muy bien cuidados y mimados para dar este aceite tan excelente. No conozco a la familia de esta Almazara, pero vaya para ell@s mi felicitación y admiración, desde este humilde, real y sencillo espacio. ¡ Gracias !

jueves, 7 de julio de 2022

El placer de comer en ATELIER, Casa de Comidas en Granada



Comer es un placer pero si es el ATELIER Casa de Comidas en Granada, donde almorcé ayer, concretamente en la C/ Sos del Rey Católico, nª7, Local 3, lo es muchisimo más. 

!Un espacio gastonómico al que le daría un EXCELENTE !


Y le daría esa nota porque hemos disfrutado desde que se cruza el umbral de la puerta, entrandoa un espacio luminoso, abierto, sereno y sencillo a la vez que elegante, con pocas mesas y muy bien colocadas, donde las parejas o amig@s pueden disfrutar placenteramente de la comida y de la compañía.
Cocinero Raul Serra, Foto de Guía Repsol

Un gran ventanal de cristales aporta luz y amplitud a esta estancia. Y una cocina abierta donde cuatro o cinco cocineros dirigidos por Raúl Sierra, el Jefe de Cocina, trabajan coordinadamente y muestran el alma de la casa. Desde el inicio se percibe la gran profesionalidad y la identidad del establecimiento.
 

Al fondo ya esperaba mi amigo y Maestro en Sumillería Jose A, que es quien nos ha invitado a este establecimiento. Cerca pude ver una estantería con algunos detalles y con libros. Como buena maestra, me emociona ver, que reservan un espacio para libros.
A medio día, en Granada y en julio, mi primera bebida fue una cerveza Alhambra bien fresquita y mejor servida, en copa su copa labrada, me daba la bienvenida al establecimiento.

Antes de empezar directamente a comer, nos han servido varios de los aceites de los que la casa dispone. Muy amablemente el camarero nos lo ha descrito mientras nos servía para catar. Pan casero y aceite, un maridaje divino. Los alimentos tienen un valor emocional, nos despiertan emociones y sensaciones como los recuerdos de la infancia.

  

Comer es un placer debido a las emociones y sensaciones que te hace sentir. Al comer, nuestras neuronas segregan una hormona llamada “dopamina” que está asociada con el sistema del placer del cerebro y hace que no podamos controlarnos.


Aqui empiezas a comer por los ojos. Es una cocina tan única y original como bellísima. Cada plato es una verdadera obra de arte. Se puede percibir la belleza del plato pero también  la sutileza y el cariño con el que ha sido elaborado.

 ¡A la mesa, te llega un verdadero manjar! mientras el Sumiller Jorge Seco, se encarga de te asesoran y maridar estos los platos con gustosos vinos, resaltando más aún la sinfonía de sabores de cada uno de los platos.

 

Me gustó mucho que al traerte cada plato te lo describen, comentando los ingredientes que llevan, la procedencia, brevemente su elaboración.... estamos ante una gastronomía placentera, innovadora, curisosa y sorprendente, al menos para mí,  que no estoy tan acostumbrada a disfrutar de estos platos . 
Sin embargo, eran productos tradicionales y  cercanos como los guisantes de Cástaras ( situ en La Contraviesa granadina ) o la quisquilla de Motril. Yo que tengo mi alma dividida entre la montaña y la mar, entre mi querida Alpujarra- Contraviesa y la costa sexitana, pues en momentos asi ¡ como no emocionarse al disfrutar de este plato!

      

Jorge Seco es el Sumiller del establecimiento y quien nos estuvo atendiendo. Como sabe de nuestra pasión por los vinos, igual que le ocurre a él, pues nos fue agasajando con vinos sorprendentes y curioso, mientras esperabamos el siguiente plato. 

                                 

 Quienes ya me conocéis, sabeis que mi vocación es el magisterio y mi pasión la cultura del vino. Pues ahora en vacaciones, es momento de disfrutar de esas pasiones como el vino, los viajes, la lectura... no quiero dejar pasar esta Casa, ya que es un lugar que no te deja indiferente y sabéis que lo que me gusta, me gusta darlo a conocer.

Arroz con leche 
                                  
Desde este humilde espacio, FELICITO a ATELIER, Casa de comidas en Granada. AGRADEZCO la atención prestada, lo bien que lo hemos pasado disfrutando de la comida, los vinos y la compañía. Y animo a Raúl Serra ( Cocinero )  y a Jorge Seco ( Sumiller ) pero también a todo el gran equipo que vi allí trabajar con tan buena organización,  pues los animo a continuar en la misma línea, dando placer a través de la comida a quienes se quieran acercar a esta casa. Insisto: Mis felicitaciones.